En marzo ya visitamos la cafetería de Salvador Bachiller en la calle Montera y Thomas hizo una excelente entrada en el blog comentando todos sus encantos.
Esta semana hemos estado en la cafetería de la calle Alcalá 151, en una hermosa mañana de sol otoñal y aprovechando la oportunidad de un vale promocional para degustar un licuado o café.
En la planta sótano de la tienda y precedida de productos house -home delicados, nos adentramos en la cafetería decorada con el mismo ambiente que el salón de té de Montera, madera, tonos verdes, palmeras, sillones cómodos, luces tenues, creando un clima acogedor para pasar un tiempo relajado.
Nos atendieron muy amablemente, yo tomé el licuado detox que me pareció exquisito, con sabores bien combinados de distintas frutas y verduras y mi acompañante un café con leche con bollería, todo ello muy bien presentado.
Lástima que le falte luz natural al local, sería ideal.
Mismo así merece la pena visitarlo, sobre todo en tan buena compañía.